CON MI BANDERA

Cuando mi cuerpo muera …Arropame…con mi Bandera
En el camposanto acuesta mi cuerpo inerte mirando al sol,no me brindes por piedad ausente, una corona de flores.
Deja que mi cuerpo descanse en algun lejano monte , deja que los verdes verdes, se acuesten... mirandolos yo

Deja que la lluvia sutilmente empape... siempre mi frente y el coquí me acompañe a mi tumba con su mejor canción.

Deja que aunque este muerto y aparente estar mi alma ausente.. que la montaña vierta en mi su llanto y su dolor.

Deja que mis luceros de este cielo mio que amo, Cielo de mi suelo Borincano de esplendor.

No quiero que de tus ojos las lagrimas se viertan
Cuando muera arropame con mi bandera

Tu y  mi Bandera …seran en mi largo viaje, de todos el mejor regalo.

Perfuma mi cuerpo inerte con gardenias silvestre y con flores de morivivi.

Adorna si quieres mis manos para asi aún cuando muera sienta que las estoy

tocando para abrirse nuevamente en otro cielo.

Que la neblina del Yunque me abraze y me este esperando a derramarse en mi luz de luna y de madrugada al levantar el gallo.

Cuando me muera no llores.

Mi cabello peinalo con las caricias suaves de la brisa, y mi ropa que sean las noches de ópalo de mi tierra.
Mi almohada sea la playa…para dormir en silencio en sus brazos.. será el sueño apacible cuando la arena y mi cuerpo con el mar se besan cuando la ola insiste siemprede nuevo y en la noche nos alejamos

Que me acompañen, las palmas, los flamboyanes,y los jibaros del campo.

En las tardes hagan fiesta los jibaritos hasta llegada la noche para ver como lloran mis versos en las noches ardientes de mis luceros.

Será el abrazo de todos los boricuas mis hermanos
me quedaré en la poesía leida…en la lluvia de mis escritos de Amor.

¡Arropame con mi bandera!

Cubre mi cuerpo con malojillo verde verde mirando siempre a mi cielo azul

de mi tierra en el ocaso cuando el mar ajeno en el horizonte se pierde y se duerme
donde en silencio las nubes cantan con los angeles su hermoso canto…corona mi frente con amapolas, rosas, café y una danza de laureles
¡Que se quede mi cuerpo al fín para siempre,

en mi bendito suelo Puerto Riqueño..!!!-